No se necesita ser un gran conocedor para adentrarse y explorar en el amplio universo gustativo que nos ofrece el vino. Valen más las ganas y tener los sentidos dispuestos para disfrutar de memorables experiencias que nos ofrece esta bebida, si se está en compañía de la familia y amigos.

Así lo aseguran Lilibeth Guzmán y Rodrigo Ramos, dos destacados sommeliers que pondrán a disposición del público todo su conocimiento durante Expodrinks 2016, la feria que  hasta el 29 de octubre sumergirá a Barranquilla y el Caribe en los cuatro mundos más representativos de los licores: la cerveza, el whisky, las bebidas espirituosas y, por supuesto, el vino.

Son más de 30 expositores los encargados de llevar hasta Puerta de Oro, Centro de Eventos del Caribe, una amplia variedad de bebidas y una nutrida agenda académica que hará de este evento, organizado por Olímpica y Corferias, el escenario para apreciar, aprender y deleitarse con la infinidad de posibilidades que trae el buen beber.

Para Lilibeth Guzmán, experta en vinos de la firma Diageo, el único requisito que debe cumplir quien desee ahondar con su paladar en el universo de los vinos es estar dispuesto a aventurarse. Esta conocedora asegura que el mejor camino por el que podrían transitar los nuevos consumidores de esta bebida es la exploración.

“Permitirse aventurar y explorar muchas variedades de vinos debe ser el primer paso de quienes ansían aprender y tener conocimiento para disfrutar de este licor milenario”, enfatiza la experta.

Rodrigo Ramos, sommelier de Dislicores, coincide con Guzmán en que con el paso de los años el mundo del vino se ha convertido en tradición y parte de nuestra cultura. Razón por la que afirma que “la sociedad quiere tener por lo menos unos conocimientos mínimos sobre cómo degustar esta bebida. Sin embargo, muy pocas personas logran hacerlo”, indica Ramos, haciendo referencia a la creencia popular que asegura que el vino solo puede ser disfrutado por grandes conocedores y las élites.

Pero desde hace muchos años vitivinicultores, enólogos y sommeliers, se han encargado de decirle al público en general que en el universo de los vinos las puertas están abiertas para todos. “afortunadamente ahora queda más claro que estas tradiciones quedaron en el pasado”, reitera Ramos.

Guzmán plantea que una vez se decidan a aventurarse en el universo del vino, estos consumidores no deben casarse ni con marcas ni con alguna clase o categoría en particular de esta bebida. “Pasa mucho que los nuevos consumidores prueban algo y se quedan solo con esa experiencia. La idea es que prueben muchos tipos de vinos que ofrece el mercado para así tener unas expectativas más altas al momento de degustarlo”, recomienda.

Ramos explica que una de las formas más eficaces para sumergirse en el mundo de este licor son las catas, y describe que estas consisten en probar un producto “cuya calidad queremos apreciar, buscando por medio de nuestros sentidos, sobre todo el gusto y el olfato, sus defectos y cualidades. La mejor manera de ir descubriendo es en la cata pues es un conjunto de métodos y técnicas que permiten ser testigo de las propiedades del vino”, enfatiza el experto.

La vista es clave para apreciar el color, limpidez, fluidez, efervescencia e intensidad. El olfato es fundamental para detectar aromas florares, frutales, terrosos, vegetales y especias. Y el gusto es necesario para disfrutar de sabores dulces, amargos, salados y ácidos. Esos tres son los sentidos que deberán tener muy activos los más de 10.000 visitantes que se esperan que arriben a Expodrinks para obtener experiencias memorables alrededor del vino.

Como recomendaciones básicas para lograr degustar en su totalidad de esta bebida, la sommelier Guzmán sugiere “no fumar ni comer chicle en las horas previas al deguste, ya que estos cambian las características del sabor de la bebida y podría tornarse desagradable”.